Daisypath Anniversary tickers

Daisypath Anniversary tickers

domingo, 21 de septiembre de 2014

Volví, el día pautado pero diferente

Nos encontramos en el parque del este tal como le dije que debía ser, para hablar, la cité en una cabaña para que no sospechara nada, al llegar le dije que debíamos tomar un taxi, saqué de mi bolso (que con toda intención era la cartera más grande que tenía) la venda para sus ojos, se la puse y juntas caminamos hasta la entrada del parque, busqué un taxi y le mostré el papel donde tenía escrita la dirección al conductor para que ella no escuchara nada. El señor manejaba mientrás ella me preguntaba a dónde iríamos con miedo pensando que sería a un hotel para otras intenciones. Después de más de 30 minutos de camino llegamos al lugar donde nos estaban esperando en la puerta para darme las llaves. Aún con sus ojos vendados, entramos a la casita que alquilé para las dos, un sitio muy sencillo pero hermoso. Desde el portón hasta la casa solo cesped y flores porque estamos en época de lluvia y la naturaleza muestra lo mejor de sí. Le quité la venda justo frente a la puerta de la casa, abrí la puerta y del techo guindaban globos rojos con cintas del mismo color, en el suelo pétalos de rosa y dos cojines en el piso para sentarnos a charlar. Nos sentamos y de mi bolso saqué el número 1 que corresponde a Dios (siempre primero), tomé la biblia (también de mi bolso) y le leí Colosenses 3, un versículo que para mí sin duda alguna resume nuestra vida juntas. Le hablé de lo importante que era Dios para nosotras y que en mi familia deseaba siempre contar con su presencia hasta el final de los tiempos, donde sólo existieran cosas de Dios y esos frutos del Espíritu que serán el norte de nuestro hogar. El número 2 era la familia, para ese puse en el radio un CD que hice con las 3 canciones de nuestras hijas, bellamente decorado, en una cajita transparente con el título de Celeste y un librito tal como los Cd´s originales suelen traer dónde estaba la letra de esas canciones y un breve resúmen de cuando las descrubrimos y lo que significan para nosotras. El número 3, el perdón, comencé a hablar del último año, a expresar todo mi arrepentimiento y el deseo de que a partir de ese momento pudieramos seguir adelante sin rencor, sólo cosechando cosas positivas y amandonos. Nos pusimos a llorar, nos abrazamos y besamos y en ese momento saqué el número 4, una caja morada (de mi bolso) que aparenta ser como todas las que hago para ganar dinero, pero al abrirla decía entre cajones: Quieres Casarte Conmigo? y en el último cajón una cajita blanca con un anillo hecho de cartón que puse en su mano mientrás decía que sí. Cuándo ella pensaba que todo había terminado, le dí el número 5, tomé su mano, quité su anillo de cartón y de mi bolso saqué un anillo verdadero que escogí con mucho amor porque una joya merece otra joya. Lloramos de felicidad, nos abrazamos mucho, salimos a estar en contacto con la naturaleza que por esa noche era sólo para nosotras y amanecimos juntas no como novias, sino finalmente como prometidas.

Sí, ese se supone sería mi día, pero no fué asi. Sin embargo he cumplido, volví a escribir hoy, el día que tenía pensado hacerlo porque esperaba significara un verdadero nuevo comienzo en el que dejaría atrás las cosas tristes para avanzar. Pero hoy sólo puedo sentirme devastada y destruída, creyendo que nada tiene sentido, vacía, sin más fuerzas para seguir.

Cuanto es capaz de soportar el corazón humano? Cuanto es posible aguantar? Sólo puedo orar y pedirte a gritos Señor, ahoga mi dolor una vez más!


lunes, 12 de mayo de 2014

Sueño vivido

Toda acción tiene una reacción igual y opuesta. Las salas de emergencia de los hospitales están ocupadas por personas que han aprendido esa lección por las malas, paracaidistas, motorizados, alcohólicos, etc. Gente cuyas ideas imprudentes a menudo pueden acabar en huesos rotos o bazos reventados. Los cirujanos y médicos en general nos entrenamos para afrontar las consecuencias de esas ideas imprudentes. Cogemos los pedazos y lo hacemos lo mejor que podemos para volver a unirlos. Sin embargo, cuando se trata de imprudencias que agreden al corazón como reservorio de sentimientos y no como órgano, no sabemos que hacer y nos convertimos en un ser humano más que ama y lucha por juntar los trozos del amor cometiendo errores en el camino.

La ví, la noche del viernes me escribió para que juntas acompañaramos a nuestra ahijada en su cumpleaños y yo acepté. Eran las 11:30 am del día sábado cuando después de esperarla 30 minutos comencé a verla llegar a lo lejos hasta la cabaña que decoré con globos para Noni. A metros de distancia pude ver su largo cabello fluir con el viento y su caminar delicado y al mismo tiempo firme tomada de la mano de los dos niños (Noni y su hermanito). No podía distinguir su rostro pero era ella, no la vi con mis ojos sino con mi corazón. Se acercaba cada vez más a mí y sin saber cómo me puse de pie y corrí hacia ellos para abrazar a los niños y felicitar a Noni, luego subí la mirada y pronuncié: Hola Mami. Hola, fué su respuesta. Caminamos los 4 hacia la cabaña y aunque casi de inmediato nos pusimos a jugar con los niños yo no estaba ahí. Realmente yo estaba pérdida en mis emociones, me encontraba en un parque, después de 1 año, en compañia de la mujer que amo. Le estaba viendo y escuchando hablar. Su rostro mostraba mucha tranquilidad y calma, su cabello estaba brillante y tan deslumbrante como siempre. Su ropa era sencilla lo cual me enamoró aún más porque asi es ella, no necesita nada más que su belleza natural para impactar. Su voz era la misma que hacía tanto no escuchaba, un tono de voz grave lleno de fuerza y sutileza a la vez. Sin un olor particular más que el de siempre, olor a mujer. Sus ojos, ventana de su alma, se mostraban llenos de vida, de seguridad, y de la presencia de Dios. Ahí estaba yo, junto a semejante mujer sintiendome pequeña e indigna de tanta hermosura.

Los minutos corrían y se iban entre juegos y un cruce de muy pocas palabras entre las dos. La vi subir a una montaña con los niños para jugar mientrás yo cuidaba las cosas en la cabaña. No pude dejar de verlos a los tres y soñar era ella junto a nuestros hijos. Dentro de mí, sucedía de todo. Estaba feliz, habia anhelado demasiado tiempo tenerla cerca y vivir esas cosas sencillas que sólo junto a ella se hacen especiales pués su compañia convierte una tarde de parque como todas en un sueño vivido. La observé en la distancia sin cesar. Oré a Dios algún día estar ahí en ese mismo lugar viéndola correr con Marena y quizás Coral. Estaba triste, mi corazón se llenó de nostalgia desde que la ví venir porque estabamos ahí en calidad de casi desconocidas después de todo éste tiempo, tuve un nudo en el pecho y garganta siempre que estuve a su lado. Estaba ansiosa, deseosa de hablar con ella y contarle tantas cosas acumuladas por contar, desesperada por tener de vuelta a mi amiga. Estaba asustada, preocupada por lo que pudiera ella estar sintiendo o pensando. Estaba angustiada, creyendo que jamás volvería a estar conmigo como mi pareja y que esos sueños no sucederían. Estaba enamorada, perdiendome entre su forma de ser tan peculiar y su belleza. Estaba segura, afirmandome a mí misma que es ella lo que quiero para mi vida. Estaba presente y ausente. Quizás simplemente estaba. 

Volvió y nos acostamos con los niños en el cesped sobre una sábana. La tuve tan cerca que pude sentir su calor corporal y su energía invadir mi espacio. Cualquier movimiento de ella ocasionaba un terremoto en mi mente. Me sentí nuevamente perdida. Hablamos, de nuestras vidas, familias, trabajos, estudios, mascotas, religión, etc. Recuperé a mi amiga, era como si no hubiese estado lejos de ella, como si ese año se hubiera transformado en apenas una semana sin vernos porque todo fluía, quería contarle todo, escuchar todo de ella, no sentí pena ni verguenza, al contrario, mi corazón estaba lleno de la misma confianza de siempre, la misma confidencialidad, la misma complicidad. Hablamos poco de nosotras porque los niños estaban presentes. Ella no abrió la puerta ante nada, como siempre dijo que no me amaba y que no quería estar conmigo. Fuí como un muro de contención manteniendo las ganas de llorar y mis sentimientos dentro de límites que me impidieron ser libre y desvanecerme sin fuerzas ante sus palabras. Agradezco a Dios la presencia de los niños porque de no estar ellos ahí mi fortaleza habría sido menor escuchando esas frases tan hirientes. 

Fuimos a comer y mientrás ella llevaba a uno de los niños al baño, lloré en la mesa para drenar algunas cosas y recargar las baterías para el resto del día. Fuí valiente, creo que me mantuve en una pieza con mucho esfuerzo y eso me enorgullece. Para cuando ella regresó ya no habían lágrimas en mi rostro. Tomamos un taxi y nos dirigimos a la casa de nuestra amiga (madre de ambos niños). Ella no quería que me fuera, pude sentirlo porque estaba entusiasmada contandome sus cosas, inclusive algo que nadie más sabía. Poco a poco todo mi huracán de sentimientos se concentró en uno sólo, felicidad. Cómo podría estar triste, ansiosa, preocupada, desesperada? Tenía frente a mí al amor de mi vida, a mi compañera de vida hablandome de sus experiencias, deseos y logros. No hay manera de no estar feliz así. 

No quería irme, pedí muchas veces que las horas pasaran lo más lento posible para disfrutar y saborear ese momento que tanto esperé. Me sentí en casa. 

Quisiera saber cómo juntar los trozos que yo misma me encargué de producir de este amor. Quisiera que mis conocimientos acerca de fracturas, suturas y heridas sirviera para curar el corazón. Me pondré de pie frente a éste paciente que es nuestro amor y sin conocer de dósis o procedimientos a aplicar seguiré mi instinto de mujer para sanarlo. Quizás me equivoque en el proceso y empeore su estado aplicando lo innecesario o inclusive arriesgando su vida con dósis deficientes o excesivas, es probable que me vea acorralada varias veces sin saber cuál será la próxima decisión a tomar o desesperada dando respiración boca a boca para no dejarlo morir pero sé que vivirá porque yo haré todo lo humanamente posible por rescatarlo y levantarlo de esa camilla aunque implique días de cirugía contínua sin comer o ir al baño. 

Cuando un médico quiere sanar se olvida de sus necesidades fisiológicas para hacer su trabajo, cuando una mujer quiere sanar puede olvidarse hasta de su nombre para lograrlo. 


martes, 29 de abril de 2014

Fé sin hechos- Amor sin hechos?

Santiago 2:14 "Hermanos míos, de qué le sirve a uno decir que tiene fé, si sus hechos no lo demuestran? Podrá acaso esa fé salvarlo?.

Santiago 2:18 "Uno podrá decir: Tú tienes fé, y yo tengo hechos. Muéstrame tu fé sin hechos; yo, en cambio, te mostraré mi fé con mis hechos"

Resulta impresionante como La Biblia está llena de grandes palabras que no sólo aplican a una relación con Dios sino a la vida misma. Sólo hace falta abrir la mente y pedir en oración discernimiento para entender y aplicar sus recomendaciones. 

Todo éste tiempo he estado declarando con mis labios la certeza que tiene mi corazón de amar a Mami. Sin embargo, me he mantenido lo más alejada posible de ella evitando escribirle más de lo necesario, pedirle que nos veamos y hasta preguntar por sus cosas. Decidí comportarme así bajo el precepto de no hacer caer a un hermano débil en la fé. No quiero ser vista como piedra en su camino ni mucho menos instrumento de Satanás. Creí que debía respetar su espacio, ciclo, tiempo y ritmo. Pensé que guardando mi corazón para ella, esperándola en silencio y tan sólo escribiendo aquí lograría que ella volviera conmigo, pero siendo sincera, ella no sabe nada de ésto, quizás jamás lea lo que escribo y si llegase a leerlo, probablemente no crea nada de lo que dice y sea insuficiente. 

Esperar por alguien sin tener la certeza de tenerlo es una muestra grande de amor, pero ella no confiará en esa espera si no está segura de lo que siento por ella. 

Es así que me permití modificar en mi mente esos versículos reflexionando que sucedería si en lugar de fé se tratase del amor: "Hermanos míos, de qué le sirve a uno decir que tiene amor, si sus hechos no lo demuestran? Podrá acaso ese amor salvarlo?." 

"Uno podrá decir: Tú tienes amor, y yo tengo hechos. Muéstrame tu amor sin hechos; yo, en cambio, te mostraré mi amor con mis hechos".

Tener fé es amar a Dios. Amar a Dios es tener fé. Amar a Mami es tener fé en ésta relación, pero comprendí que mi amor sin hechos no es suficiente. 

No es fácil controlar las emociones y pensar la mejor forma de demostrar lo que siento. Tengo muy claro que no quiero obligarla a verme ni mucho menos basarme en la atracción física para atraerla a mí porque eso no es lo que nos une sino un sentimiento profúndo y complejo que debo encontrar como expresar. Yo fallé en ésta relación y aunque ella dice haberme perdonado es lógico que por amor a sí misma quiera merecer algo digno de ella. Yo soy digna de Mami y ella es digna de mí. Le demostraré la intensidad de éste amor de modo tal que no queden dudas. 

Seguiré esperando y guardando mi corazón sólo para Mami, seguiré escribiendo como lo he hecho para que todo quede registrado y podamos reírnos de ello al estar juntas, pero además de éstas cosas, comenzaré a actuar. 

A tí te digo amor: Abre bien los ojos para que puedas ver las señales que enviaré para tí. Abre tus oídos para escuchar mis mensajes. Dispón tu sentido del gusto para sentir el dulce de éste amor. Agúdiza tu olfato porque llenaré de aromas tu vida. Pero lo más importante es que tengas un corazón dispuesto para darte cuenta del esfuerzo que cada detalle llevará y del sentimiento tan inmenso que está detrás. Cada 20, de cada mes, de cada año, yo estaré ahí!

A Dios pido mucha calma y autocontrol para no desesperar y actuar con cautela. Sabiduría para escoger los métodos adecuados y que mejor expresen lo que siento. Y fortaleza como cada día porque sé que ésto no será fácil y apenas comienza. 

Nada va a separarnos, no soy instrumento de Satanás porque lo que siento por ella viene de Dios. Si ella quiere huír de mi camino, yo deberé aparecer en el suyo.

Mostraré mi amor con mis hechos.




lunes, 28 de abril de 2014

Encuentro



Durante éste fin de semana estuve realizando un encuentro cristiano al que Mami me invitó... si, olvidé contarlo antes pero en una de nuestras conversaciones cortas y fugaces me propuso ir a éste retiro y yo acepté. 







La razón de mi aceptación es compleja. Por un lado siempre he amado a Dios y estar en su presencia es una experiencia inigualable, hace tiempo no asistía a uno y realmente deseaba más de Él. Sumado a eso necesitaba perdonarme a mi misma porque las decisiones que tomé el año pasado destruyeron mi relación con Mami y aún sufría sintiéndome culpable. Además quería someter mi amor al horno de fuego, no hay nada que me quebrante más que la presencia del Espiritu Santo en mí y aunque desde hace mucho me siento amada por Dios siendo homosexual, quise estar ahí con corazón dispuesto y probar de nuevo mis sentimientos. Por último, quise dejarme confrontar.







El encuentro fué en general espectacular. He hecho muchos y éste es uno de los mejores. Es indudable que Dios estuvo presente en todo momento.







Desde el primer día abrí mi corazón y escuché cada prédica con atención y amor. En ningún momento puse corazas en mí, ni mucho menos dejé de pensar que era el mismo Dios quien me estaba diciendo cada palabra. Uno trás otro los temas eran cada vez mejores y más interesantes. 







Ocupé todo el tiempo libre que tuve en hablar con los líderes del encuentro. Confesé mi lesbianismo y me dispuse a defender éste amor que siente mi corazón. No sé cuantas veces escuché respuestas negativas a esto. No sé cuantas veces escuché que no podía amar a Dios y al mismo tiempo a una mujer. Que la luz no puede juntarse con las tinieblas. Que en la creación eran hombre- mujer. Que el pene tiene una función. Que Romanos dice ésto y Levítico aquello. Fué realmente emocionalmente agotador. 







Siempre respondí a todo eso con alguna explicación. Por lo que al día siguiente la líder con la que conversé me pidió que hablara directamente con su esposo. La conversación con él fué menos intensa, pués no involucró a la biblia sino al Espiritu. Al terminar de hablarle hizo una oración pidiendo por mí y recuerdo regresar a la habitación sintiéndome triste, como si nuevamente creyera que amar a Mami me alejaba de Dios. 







Pero hay algo que marcó este encuentro. Más que las confrontaciones, charlas y discusiones fué el mismo Espiritu Santo quién me dió la respuesta. El último día del encuentro lo sentí en mi corazón. Sentí como entró a mi cuerpo y llenó cada centímetro de el. Quebrantó mi alma. Lloré como jamás lloré alguna vez. Caí de rodillas ante El y me quedé sin fuerzas para ponerme nuevamente de pie. Me sentí llena, amada, bendecida, victoriosa. Es un antes y un después en mi vida luego de eso. 







Amo a Mami, la amo con todo mi corazón y amo a Dios con el doble de la fuerza que le amo a ella. Si luz y tinieblas no pueden juntarse en un mismo lugar, cómo es que el Espiritu Santo entra en mi corazón y me toca de esa manera? Cómo es que Dios llenó cada parte de mi ser aún reconociéndome a mi misma como lesbiana porque la amo? Cómo es que lo más sagrado que pueda existir que es el Espiritu Santo haya podido entrar en mi casa si yo jamás renuncié ni me liberé de mi amor por Mami?





La respuesta es clara para mí. No había tinieblas en ese momento en mi corazón porque yo habia renunciado a todo lo viejo menos a éste amor. Renuncié a la fornicación, mentira, orgullo, egoísmo, infidelidad, tristeza, rabia, rencor, dolor, desánimo, flojera, rebeldía, manipulación y muchas cosas más pero nunca de mis labios salió una renuncia al amor que siento por ella. Entonces mi casa estaba limpia de todo lo que realmente manchaba mi alma para recibir al Espiritu Santo, por eso El pudo entrar y tocarme de ese modo. Es que el amor jamás podría ser una tiniebla porque Dios es amor y luz!

Fué el mismo Espiritu Santo quien volvió a darme seguridad y convicción de éste amor. Y comprendo que no basta con eso, yo debo demostrarle a ella la intensidad de lo que siento, debo darle el lugar que merece como mujer después de lo que hice. Debo tener fuerzas suficientes para actuar y que a ella no le queden dudas de mi amor. Debo ganarme su regreso porque fallé y es mi responsabilidad. Le demostraré que ésto es real y que deseo se convierta en un amor infinito como el de Cristo. 

Estoy renovada, no soy la misma luego de éste fin de semana, me he perdonado por lo que hice, he aceptado mis errores y he decidido alejarme de todo aquello que contamine mi amor por ella. Oraré cada día para que Dios me llene de fortaleza en ésta lucha y conforme al tiempo y mis acciones ablande el corazón de ella haciéndole ver la inmensidad de mi amor. Si Dios está conmigo, quién contra mí? 


miércoles, 23 de abril de 2014

Música que parece escrita sólo para tí...

Sólo Dios sabe lo mucho que sufre mi corazón por mis errores cometidos... Sólo Dios entiende lo duro que es estar en mi lugar justo ahora. No imagino lo mal que lo pasaste tú cuando yo decidí olvidar que te amaba y fallarle a nuestro amor. Quizás merezco éste sufrimiento porque tenía que aprender ésta lección de vida. Te amo Mami... perdóname porfavor! Volvamos a construir juntas nuestro presente y futuro, que no se te olviden nuestros sueños! 

 

 

lunes, 21 de abril de 2014

Errores y más errores

Hoy me levanté temprano en la mañana para hacer algunas diligencias pendientes. Fuí al centro de Barquisimeto y pasé por aquel centro comercial que siempre fué testigo de nuestros almuerzos juntas en esas pocas horas libres que yo tenía al día. Entré a la tienda que se convirtió en una rutina nuestra para compartir el sueño de ser madres viendo la ropa de bebés y los accesorios. Me senté en esas mesitas pequeñas frente al puesto de donas y comí una como solíamos hacer. Pasé por mi universidad y de lejos ví los transportes estacionados donde regresabamos a casa después de culminar su espera por horas hasta que yo saliera de clases. Para depositar decidí ir a otro centro comercial en el que ibamos al cine durante la tarde, comprabamos entradas para la primera función para llegar temprano a casa y no tener que justificar la salida con mis padres. Caminé y me paré frente a la taquilla observando las opciones de películas riendo porque escoger una era una odisea con nuestros gustos opuestos. Regresé a casa, tomé mi computadora y me hizo falta tenerla junto a mí usando aquella popular excusa de fallas en su internet. Llegó la noche y me encuentro sóla en mi habitación en lugar de estar con ella conversando, discutiendo o haciendo el amor. 

Recordar tantas cosas me hizo pensar que deseo profundamente que todo vuelva a ser como antes, pero mientras reflexionaba comprendí que no es así. En esa historia relatada que resume gran parte de nuestros días hay cosas que no deseo repetir. Mirar atrás me ha hecho comprender que mas allá de mis errores cometidos este último año, hay muchos otros que jamás ví. Siempre fué ella quien sacrificó su tiempo para estar conmigo, ella iba a mi universidad, ella me esperaba, ella se trasladaba cada día al mismo lugar. Siempre miramos aquellas cosas de bebés juntas y yo ya no quiero sólo mirar, quiero comprar y comenzar a edificar ese sueño. Siempre salimos y nos veiamos a escondidas, inventando excusas que ya no quiero inventar más porque se que la amo totalmente y quiero darle su lugar. Siempre al llegar la noche gran parte de ella la pasabamos llorando y discutiendo, no sólo no quiero más de eso sino que quiero que al llegar la noche no seamos dos, sino tres, cuatro y cada vez más. Escoger una película no será más motivo de discusión, porque quiero que las infantiles sean nuestra elección. 

Es así como entendí que todo, absolutamente todo sucede por alguna razón. Yo no quiero estar como antes, quiero estar mejor. Si bien es cierto que esta situación me provoca dolor, también lo es que pasando por ésto he reflexionado mucho acerca de cosas que antes debí ver y nunca lo hice. Siento como mi espiritu se eleva y realiza una autocritica de los últimos años dejándome ver todos mis errores.

Yo se que todo esto que siento me cuesta expresarselo a ella, y mas costará que ella algún día me crea. Sólo Dios sabe lo mucho que sufro y lloro cada día por su ausencia. Me reclamo a mi misma muchas veces por haberme ido en ese momento de dificultad. Todo fuese tan distinto si yo hubiese tenido la fuerza y valentía de enfrentar nuestra enfermedad confiando y creyendo en ella. No se cómo pude dudar de su amor si quien tenía razones para dudar era ella del mío.

Dios y nuestros hijos siguen dandome fortaleza, se que esto no será fácil pero sin importar el tiempo que tome, el final será el mismo. Estaremos juntas haciendo realidad nuestros sueños.

domingo, 20 de abril de 2014

Cuidar el alma para sanar el cuerpo

Hoy recibí una llamada telefónica que me alegró inmensamente el día. Era una paciente que alguna vez atendí en el hospital, estuvo hospitalizada por espacio de 1 mes en el cual forjamos una linda amistad siempre guardando el respeto de una relación médico-paciente, aunque debo admitir que me cuesta mucho no involucrarme emocionalmente con cada paciente que llega a mí pero hago mi mayor esfuerzo. El caso de ella fué muy especial, desde el primer día cuando apenas estaba recaudando los datos para llenar la historia clínica de su ingreso, ella sintió en mí el apoyo que necesitaba y entre lágrimas me habló del reciente fallecimiento de su esposo aún cuando eso no era parte del interrogatorio. Yo no hice más que escucharle atentamente y colocar mi mano en su espalda en señal de comprensión. Tardé mas de lo habitual en completar la historia clínica motivo por el cual recibí un reclamo del médico de guardia pero mi corazón estaba en paz porque cuidar y sanar el alma también es parte de la medicina. Durante su estadía en el servicio, conversamos en varias oportunidades por largo rato, quisiera decir que el suficiente, pero mentiría pues entre ocupaciones y escaleras pasan las horas de manera muy rápida y establecer relaciones con las personas hospitalizadas se hace cada vez más díficil. He tenido que asistir horas extra al hospital para reponer mi ausencia emocional y aunque eso reduce mi tiempo libre, me llena de felicidad. 

Juntas hablamos mucho acerca de Dios, ella es cristiana y acostumbra participar activamente en la iglesia, sin embargo, estaba pasando por un momento de depresión y le vino bien hablar y desahogarse. El quebranto nos acerca al Padre.

Con ella aprendí muchísimas cosas. Una de ellas es que la enfermedad puede ser una iniciación. Estar enfermo lleva al paciente a un estado de reflexión profunda acerca de la manera en que ha llevado su vida y cómo desea conducirla a partir de ese momento. Estando hospitalizado hay muy pocas cosas por hacer y es por ello que se puede dedicar el tiempo a escucharnos a nosotros mismos y replantearnos nuestros objetivos. Al mismo tiempo comprendí que no es posible considerar el cuerpo como un objeto inconexo de la vida, sino como la propia alma manifestándose a través de los sentidos. Esa paciente estaba enferma producto de sus emociones, cómo supone un médico curar a un paciente si no sabe nada de su alma, sus problemas y su carácter?

Es por ello que comprendo que el médico que piensa que lo sabe todo nunca conectará con sus pacientes. Pero cuando se da cuenta de que puede relacionarse mejor con ellos, abandona la necesidad de omnisciencia y se relaja lo suficiente para relacionarse con las personas desde el nivel de la imperfección y limitación. 

Sentir la llamada para hacer éste tipo de trabajo marca el inicio de una dimensión espiritual. No se está sólo trabajando, ni se es sólo un técnico. Todo tu ser está implicado en tu misión y la gente lo percibe en el aire que te rodea. 

Durante nuestra conversación telefónica, ella expresó sus palabras de agradecimiento conmigo y textualmente dijo "El amor con el que fuí atendida por tí y el Dr. me sanaron". En ningún momento mencionó aquel diurético que se le administró para disminuir su derrame pleural, o la antibioticoterapia aplicada para su neumonía. Dijo también que oraba por mí y por la persona que yo amaba, que una vez le comenté estaba esperando, para que nuestro encuentro fuese pronto. Me regaló un millón de bendiciones y un Dios guie sus pasos como despedida.

Ella pensó llamarme para agradecerme, pero lo que no sabe es que soy yo quien está agradecida con ella y siempre lo estará, por todo lo que su presencia me enseñó. Se que sus oraciones están contribuyendo al encuentro que algún día Mami y yo deberemos tener. 

No me queda duda de las muchas deficiencias que el sistema de salud tiene en relación a tratar holísticamente un paciente entendiendo que es cuerpo, alma y espíritu. Pido a Dios que me permita seguir actuando con amor sin transformarme en un ser inmutable y despota como el que el mundo de la medicina está acostumbrado a crear. Momentos como éste dan fuerza para marcar la diferencia.

miércoles, 9 de abril de 2014

POSITIVO

Es muy triste para mi el título de ésta entrada, pues en lugar de tratarse de cosas positivas (desde el punto de vista motivacional) se trata de algo que te marca la vida para siempre.

Mami y yo tenemos un amigo gay en común, lo conocemos desde hace aproximadamente 8 años. Durante el bachillerato fué muy cercano a nosotras, recuerdo que en 4to año quiso ser mi novio pero nunca me gustó lo suficiente, siempre lo ví como mi amigo casi hermano. En principio, nos considerabamos heterosexuales los 3 pero con el paso del tiempo la relación entre Mami y yo se transformó en algo más y él fué testigo fiel de todo el proceso. Años después, decidió salir del closet, confesarnos que era gay y permitirnos formar parte de su primera relación amorosa con otro hombre. 

A pesar de tener la misma orientación sexual que nosotras durante el camino tomamos vías diferentes, Mami y yo siempre nos mantuvimos alejadas del "ambiente" e intentamos vivir bajo el precepto de "ser sin pertenecer", sin embargo nuestro amigo (Julio) poco a poco se transformó en otra persona, alguien liberal, mentiroso, manipulador e irresponsable. 

Nuestro amor hacia él siempre ha sido el mismo, no sé que sienta Mami por Julio en éste momento pues hace mucho no hablo del tema con ella pero en mi corazón él es y será importante el resto de mi vida sin importar su conducta, el número de parejas sexuales que tenga o sus mentiras.

En éste tiempo sin Mami continué manteniendome alejada de él, pero hace alrededor de 4 o 5 meses comenzamos a ser más cercanos, cosa que fué negativa desde el punto de vista conductual para mí, pues me dejé influenciar por sus ideas y me incluí en un ambiente en el que nunca antes estuve. Esa cercanía nuestra hubiese terminado si en los últimos 3 meses no hubiesemos tenido que vivir probablemente el peor momento de su vida. Siendo mas explícita, me bastó pasar apenas 1 mes junto a él para querer alejarme nuevamente y recuperar mi propia esencia pero por decisión de Dios no lo hice y hoy he logrado recuperar esa esencia pérdida sin dejarlo sólo cuando más necesita mi compañia. Por eso digo que el tiempo de Dios es perfecto, era necesario que me uniera a él para colaborar con todo lo que pueda mientrás pasa por éste duro momento.

Me duele relatar en retrospectiva lo que para mí han sido unos duros días, pero lo que yo pueda sentir no es nada comparado a lo que Julio está sintiendo ahora en la soledad de su habitación. Está recogiendo la cosecha de su siembra y eso debe estarle haciendo gastar unas cuantas lágrimas.

Julio decidió confiar en mí, quizás porque estudio medicina, quizás porque de sus amigos soy la más centrada, quizás porque vió que volví a su vida y sintió la necesidad de hacerlo, quizás porque no tiene nadie más en quien confiar de ese modo, quizás porque Dios mismo le guió a hablar conmigo, quizás porque hoy en día soy ejemplo para él manteniendome alejada del ambiente pero conservando su amistad, quizás simplemente porque así debia ser. Hace días sentados en la cancha de mi urbanización me confesó que había estado sexualmente de forma irresponsable con una pareja y que la misma le habia llamado para decirle que tenía VIH. Fué un duro momento pués la posibilidad de que Julio estuviese infectado con el virus era muy alta, ambos lloramos y en medio de la tristeza le propuse orar y pedir a Dios lo contrario. 

Al día siguiente le lleve a un laboratorio a realizarse una prueba, decidimos ir a un centro comercial a esperar la tarde para buscar el resultado. A las 11 de la mañana el laboratorio llamó para solicitarle a Julio dirigirse nuevamente a tomar otra muestra sin dar más explicaciones. Desde ese momento mi corazón sintió dolor, conozco de medicina, sé que es un protocolo pedir una segunda prueba cuando se obtiene un primer positivo. Sin embargo, callé y oré en silencio. El resultado estaría para la siguiente tarde, lo acompañé en todo momento pidiendo a Dios fortaleza para transmitirsela a él. 

POSITIVO estaba escrito en aquella hoja que hoy tuve en mis manos y que me hizo caer en un llanto incontrolable en el suelo. Julio dando muestra de una enorme valentía me levantó y me prometió que haría todo lo necesario para estar bien cumpliendo el tratamiento indicado y modificando su estilo de vida. Lo abracé, sin pensarlo le dije que le amaba con el corazón a pesar de la distancia que muchas veces nos ha separado, le hice prometerse a si mismo y a Dios que pondría todo de su parte por estar bien y evitar partir en los próximos años.

No tengo palabras para explicar lo que siento en éste momento, desde que llegué a casa he llorado encerrada en mi cuarto, no puedo siquiera imaginar como está él en el suyo. Sé que todos somos responsables de lo que nos pasa, sé que ésto es algo que él pudo haber evitado, sé que él mismo lo buscó llevando ese estilo de vida tan irresponsable y alocado. Pero también sé que es un ser humano y que lo quiero y me duele lo que le está pasando.

El tiempo se detiene, la respiración se frena, el pulso se acelera y el temor te invade al tener el papel frente a tí. Entre lágrimas pienso en lo irresponsable que yo tambien fuí éste tiempo al estar con un hombre sin conocerlo bien arriesgándome a mi y a Mami a pasar por algo similar. Siempre me cuidé del modo correcto y después de estar con él me he revisado en 2 oportunidades para cualquier cantidad de cosas obteniendo siempre resultados negativos, pero cómo alegrarme de mi suerte cuando mi amigo pasa por ésto?

Pido a Dios la fortaleza que necesito para ser el apoyo de Julio y poderle transmitir paz, esperanza y fé. Ojalá éste momento de sensibilidad sirva para que él se acerque al Dios misericordioso y amoroso que nos ama, acepta y perdona siempre. Ojalá pueda ser yo ese canal para encontrarlo con el camino adecuado. Ojalá Dios ponga en mi boca las palabras que debo decirle de ahora en adelante y en mis manos los gestos que le hagan sentir amado y no rechazado por nadie. Ojalá de la tormenta llegue la calma manifestada en el amor de Dios en la vida de Julio.

De ahora en más, espero amanecer cada día cargada de valentía para continuar haciendo todos los pasos junto a Julio, es necesario realizar muchas pruebas de laboratorio más, asistir a consulta, determinar tratamiento, en fin, ésto apenas comienza.

Dios te dé muchos años de vida amigo, aun con fallas siempre has estado para mí, hoy yo estaré para tí... me quedo sin palabras en tan duro momento. Te amo!


PD: Si algún día por lejano que sea lees ésto Mami y no tenemos contacto no le comentes a Julio nada, él no sabe de la existencia de éste blog, sólo tú lo conoces y los lectores que nos siguen desde otras partes. La única que puede saber y entender de que hablo eres tú. Siento deseos de escribirte y contar con tu apoyo pero entiendo que no debo alterar el proceso entre nosotras hasta que Dios asi lo decida.

martes, 8 de abril de 2014

DESDE LEJOS espero ansiosa CUANDO REGRESES


Deseos

Sin los deseos oscurecemos, porque desear es parte de nuestra esencia. Tenemos la enorme oportunidad de vivir éstos tiempos de cambios con nuevos enfoques y descubrimientos, entonces por qué no aprovecharlos de verdad?. Llegó el momento de crecer en armonía entre la razón, la emoción y los sentimientos que pautan nuestras conductas, porque los verdaderos deseos y anhelos nacen del corazón.


domingo, 6 de abril de 2014

Amor o Capricho?

Hace días mientras revisaba mi perfil de facebook me encontré con una publicación de esas que promocionan páginas web o alguna aplicación, creadas con la única finalidad de atraer a las personas. El título de la misma era: 10 señales de que se está viviendo el verdadero amor. Sentí curiosidad de verla porque estoy segura de estar viviendo el verdadero y único amor de mi vida, asi que hice click y me dispuse a leer a pesar de saber que podría encontrarme con cualquier cantidad de tonterias que distaran mucho de ser reales pues no todo lo que se consigue en la web es confiable. Para mi sorpresa, no se trataba de una página cualquiera, por el contrario decía cosas muy interesantes en base a las cuales reflexioné mucho. 

1. Paciencia de hierro: Si bien es cierto que nunca he sido un derroche de paciencia pues me caracterizo por tener un carácter muy intenso y dominante, actualmente estoy llena de ella, no se de donde salió y no se cuando pero la realidad es que tengo la paciencia necesaria para esperar años por Mami, para callarme y escuchar sus reproches y frases dolorosas, para concentrarme en ella y no hablar más de mí, para mirar de lejos y seguir soñando, para aguantar, para amar en silencio, para luchar, para caer y levantarme de nuevo. Tengo paciencia por mí y por ella. 

2. Seguridad: En ésta sección se referían a esa sensación de saber que esa es la persona para tí a pesar de tener otras a tu alrededor quizás más atractivas o accesibles. Me sucede todos los días ver en cada persona que me rodea el reflejo de Mami. Estoy segura de desear mi futuro al lado de ella, para mí no existe otra opción y si por decisión de Dios eso no ocurre, creo que la soledad será mi mejor compañia hasta que decida romperla con los hijos que siempre he deseado tener, pero sola, como madre soltera. 

3. Felicidad: El artículo hacía referencia no a la felicidad personal sino a la felicidad del otro. Éste tema lo he comprendido con mucha profundidad, pués hoy en día asumo que la felicidad de ella está por encima de la mía. Desde que decidí esperar por ella me mantuve alejada porque sabía que estaba feliz junto a Dios y no quise de ningún modo ser yo quien interrumpiera eso. En cambio, veia desde lejos sintiendome contenta por ella, alegre de que pudiera mejorar su relación familiar y consigo misma. Hoy sé que aunque ella decidiera compartir su vida al lado de alguien más, yo estaría llena de felicidad por la suya. 

4. Canciones: Parece una tontería pero sí, cada canción me recuerda a ella. 

5. Compañia: Es ese deseo de estar en compañia del otro, ese que me quema por dentro cada mañana deseando verla, hablarle, escucharla, acariciarla, besarla. Esa sensación de estar completa pero insatisfecha porque no está ella a mi lado. Es ese deseo de ser yo y de que ella siga siendo ella, pero que formemos un nosotros duradero. Esa necesidad de la persona que cumplía y cumple todos los roles en uno: es mi amiga, mi confidente, mi hermana, mi pareja, mi amante, mi medicina, mi enfermedad, mi tristeza, mi felicidad. Cuando se fué me quedé vacía necesitando alrededor de 7 personas para llenar los espacios que ella llenaba siendo una sóla.

6. Compromiso: No tengo miedo al compromiso, deseo profundamente casarme con ella, como nunca antes lo desee. Si Dios me diera la oportunidad de volver a su lado, todo sería diferente. No permitiría nunca más que ella ingresara a mi casa en calidad de amiga. Desde el primer día me encargaría de darle el puesto que merece presentándola como mi pareja, mi futura esposa y la madre de mis hijos aún sabiendo las consecuencias de esa acción, pero es que sé que ella es lo que realmente quiero, sé que no hay más ni menos, es ella, y sintiendo esa convicción porque habría de seguir callando? De hecho, por increíble que parezca he pensado ser sincera con mis padres ahora mismo aún sin estar a su lado porque aunque ella no esté la amo y la amaré siempre. 

7. Recuerdos: No hay día en el cual no recuerde algún momento juntas, desde aquella primera noche un 20 de septiembre en la feria de Barquisimeto, la primera noche en el hotel Lancelot, mi cumpleaños 18 celebrado juntas comiendo fresas con crema, el inicio de tu carrera universitaria, tus clases de guitarra fallidas, la realizacion de tu documental, las visitas casi diarias a Tijerazo para ver ropa de niños, mi primera visita a tu casa en tu cumpleaños, aquel viaje a Punto Fijo en semana Santa, hasta los momentos más simples como caminar conversando en las Trinitarias esperando entrar al cine, jugar póker en casa, usar las maquinitas en contra de tu voluntad, comer helados, ir al parque bararida, dormir a tu lado, escucharte respirar. 

8. Escucha: Esa capacidad de callar para escuchar todo lo que el otro tiene para decir, eso que me empuja a dejar de lado mis sentimientos para enfocarme en ella. No se trata de oír que es el simple acto de utilizar el sentido del oido, sino de escuchar de verdad haciendo que las palabras pasen por el corazón antes de llegar al cerebro para poder sentirlas y almacenarlas en el alma.

9. Perdón: La he perdonado a ella y a mí misma por todos nuestros errores y aunque reconozco mis fallas, no son una carga pesada de llevar porque se las he entregado a Dios y me he liberado de ellas.

10. Fé: Hay una fé absoluta en la pareja. Se cree en que todo lo que hará saldrá bien, aunque las circunstancias no apunten hacia ello. Cada día recibo más mensajes desalentadores de su parte y aunque en el momento me bajan el ánimo inmediatamente recupero la fé en nosotras porque existe algo que no puedo explicar, lo mismo que me hace creer en Dios sin haberlo visto, que me dice que ella y yo nacimos para estar juntas.

Al finalizar la lectura de la página y mis reflexiones me dí cuenta que no hay resúmen mejor para ésto que 1 Corintios 13:14 "Tener amor es saber soportar, es ser bondadoso, no tener envidia, ni ser presumido, ni orgulloso, ni grosero, ni egoísta; es no enojarse ni guardar rencor, es no alegrarse de las injusticias sino de la verdad. Tener amor es sufrirlo todo, creerlo todo, esperarlo todo, soportarlo todo". 

Ésto es amor, yo lo sé, Dios lo sabe. Ojalá algún día ella reflexione acerca de ésto y pueda descubrir que me ama y la amo. 


domingo, 30 de marzo de 2014

Señales...

 Hace algunos días no escribo, eso no significa que algo haya cambiado en mí pues pueden pasar meses pero la certeza que hoy tiene mi corazón no cambiará.

He tenido una semana muy interesante, mientrás continúo esperando por tí, Dios me envía señales, probablemente más de las que puedo captar pero las pocas que logro entender las asimila mi corazón. 

A inicios de semana, lo primero que sucedió fué que me encontraba leyendo en mi cuarto La Biblia en horas de la noche. Decidí volver a leerla completa dedicándole el tiempo que requiera y al terminar en días anteriores los libros de Hechos de los Apóstoles y Juan me dispuse a empezar Mateo (es un orden aleatorio según dicta mi corazón). Tenía alrededor de una hora leyendo y al llegar a Mateo 7:1 "No juzguen a otros para que Dios no los juzgue a ustedes. Pues Dios los juzgará a ustedes de la misma manera que juzguen a otros; y con la misma medida con que ustedes den a otros, Dios les dará a ustedes" me quedé reflexionando en silencio acerca de ese versículo. Mientrás analizaba lo que acababa de leer, comencé a escuchar el televisor que se encuentra en la sala de estar junto a mi cuarto. Para mi sorpresa, alguien estaba viendo un programa sobre homosexuales, me quedé callada escuchando lo que decían y muy triste debo decir que no eran cosas positivas. Una de las cosas que pude escuchar era que los homosexuales queríamos dominar el mundo y convertir a todos los demás en homosexuales también y que para ello utilizabamos los medios de comunicación y nuestras muestras de afecto públicas para que los niños crecieran viendo ésto como normal. A su vez dijeron que nuestro corazón era malo y estaba influenciado por el mismo demonio quien guiaba nuestra vida. Acto seguido se dijeron muchísimas cosas más que no me atrevo a decir porque me causa total indignación. Lo que estaba escuchando fué tan intenso que no pude soportar más, abrí la puerta de mi cuarto y me asomé a la sala, era mi padre viendo el canal cristiano, sí, UN CANAL CRISTIANO. Con voz suave pero decidida le dije: padre, estás escuchando todas esas cosas? Acaso los homosexuales no son seres humanos también?. Mi padre que es bastante homofóbico me dió la razón y prefirió apagar el televisor. Me parece que Dios fué muy claro conmigo esa noche, leía acerca de no juzgar y escuche el juicio más intenso que haya oído alguna vez hacia nosotros viniendo de cristianos. Me queda claro lo que Él quiso decirme, ojalá para quienes me lean esté igual de claro. 

Dos noches después nos encontrabamos en la mesa cenando mi madre, hermana y yo. Conversamos acerca de muchas cosas y sin saber cómo, comenzamos a hablar del hijo gay de una amiga de mi madre. Decíamos que estaba teniendo problemas en su familia por tener tantas parejas distintas y cambiarlas en tan poco tiempo. Mi hermana me impresionó diciendo: madre, lo ves así porque es gay, pero que pasaría si se trata de un heterosexual con muchas novias? Seguramente no sería algo tan grave para tí. Yo no quise emitir opinión alguna pero mi madre que muy poco se queda callada, continuó diciendo: Parece que es imposible para los homosexuales no tener sexo, quisiera ver una pareja que sea capaz de hacerlo, es imposible pues ellos sólo piensan en eso. En ese momento recordé que apenas la semana pasada le dije a Mami que me gustaría estar con ella y guardarnos hasta que podamos casarnos, y recordé que nuestra relación nunca se basó en sexo, por el contrario, podíamos pasar meses sin estar juntas y el amor seguía siendo el mismo. Nosotras podemos ser ejemplo de eso. Nosotras podemos ser quien le muestre a mi madre y a muchísima gente más que se puede ser homosexual y aún así vivir conforme a lo que Dios dicta. Sexo no es amor.

Llegó el fin de semana y el viernes habia quedado con una amiga en ayudarle con el proyecto escolar de su hija de 4 años a quién llamaré Nina. Estuve desde temprano con ellas trabajando, cortamos anime, pintamos, hicimos figuras con foami, etc. En general fué un día maravilloso, los niños siempre llenan el alma de sentimientos bonitos y transparentes, igual que las personas especiales y ancianos. Nina conoce también a Mami, pués ambas somos sus madrinas, razón por la cual cada vez que la veo me pregunta por Mami y ya estoy acostumbrada a ello. Pero ésta vez fué diferente, no quiso sólo saber de Mami sino que quiso saber cuando volveríamos a estar con ella pero juntas. Por qué no está aquí? Cuándo va a venir contigo? Por qué vienes sola? Por qué no viene también ella?. Mi respuesta estuvo basada en que Mami tenía muchas ocupaciones pero eso dejó en mí la sensación de vacío que aún experimento. La realidad es que hemos compartido infinita cantidad de experiencias juntas, no sólo las visitas a Nina, sino un millón de cosas más y que mi corazón desea volverlas a disfrutar en su compañia. Los niños, que todo lo perciben, están comenzando a sentir que ese momento debe llegar, las preguntas de Nina son una muestra de ello.

El sábado en la mañana recibí la llamada de una amiga que hace más de un año no veía, incluso desde antes de terminar con Mami, pues está viviendo en Caracas que está a unos 600 kms de aquí, sin embargo jamás perdimos contacto. Trabaja como aeromoza y vive con otra mujer, ambas tienen un hijo que actualmente tiene 3 años y que cada día crece más sano y lleno de vida. En su llamada me decía que estaba acá en Barquisimeto de visita y que lo primero que deseaba hacer era verme y permitirme pasar tiempo con su bebé. La propuesta me encantó, así que me arreglé y salí a encontrarme con ellos, estaba mi amiga, su pareja y el bebé. La relación de ellas ha pasado por muchos obstáculos entre los cuales estuvo alguien más presente por espacio de casi 2 años, sin embargo, el amor pudo más y me complace decir que las ví felices y enamoradas constituyendo el hogar que algún día yo quiero formar con Mami junto a Dios y nuestros propios hijos. Parece increíble pero jamás los había visto interactuar de nuevo como familia desde aquella visita que hicimos Mami y yo cuando el bebé nació. Creo firmemente que Dios quiso permitirme pasar tiempo con ellos para entender que nada es imposible para Él y que los años separados no definen el final de la historia. Su hijo es un bebé feliz, educado, tierno y amoroso, sin contar que fisicamente es todo un galán. Es un niño que ha crecido en un ambiente homosexual y eso no ha afectado en nada su desarrollo y mucho menos su felicidad, todo lo contrario incrementa en él su capacidad de amar. 

Quisiera poder contarlo todo con más detalle pero la idea es no aburrir a nadie y poder llevar un registro de lo que será éste tiempo para las dos, principalmente para mí que soy quién escribe. Insisto en que debo escribir todo lo que pueda porque algún día leeremos éstas cosas juntas a nuestros hijos y ellos verán que nos amamos aún en la distancia. Verán también que yo aunque pasen los días sigo decidida a esperarte porque sé que te amo. Que Dios siga obrando en nosotras y guiandonos hacia su voluntad. Esperar en Cristo es una espera dulce que se disfruta. 

Colocaré unas fotitos del producto final del proyecto de Nina, espero salga bien en su presentación. :D






martes, 25 de marzo de 2014

Corazón en paz

Quiero compartir con ustedes lo que ha sucedido éstos dos días. Digo con ustedes porque sé que en alguna parte del mundo hay gente que me lee y espero con mis entradas servir de medio para ayudar a quienes pasan por una situacion similar a la nuestra. Escribo éste blog desde Venezuela, país que para la fecha se encuentra inmerso en una ola de protestas cívicas diarias desde hace más de un mes y que además de eso se enfrenta a graves problemas económicos de abastecimiento, devaluación e inflación. La revolución social actual sumada a medidas inadecuadas de control han empeorado los problemas que nos afectan. Hoy en la tarde, mi padre llegó llorando a casa diciéndonos a todos que habia quedado sin empleo porque las empresas para las cuales trabajaba se vieron forzadas a cerrar sus puertas por falta de mercancía y divisas. Si bien la noticia no nos tomó por sopresa pues ya sabiamos que ésto podría pasar en algun momento, fué duro asimilarlo como una realidad. Afortunadamente tengo una familia, aunque dividida en cuanto a religiones, que cree en Dios y como resolución decidimos orar juntos dejando nuestras cargas en las manos de Nuestro Padre. Sumado a ésto, tus buenos días ésta mañana fueron de despedida. Sin embargo, me hace feliz decir que a pesar de un día que probablemente para cualquiera sería un caos, mi corazón está tranquilo y confiado en Dios.

Recuerdo que hace años los problemas parecían insostenibles e insoportables. Muchas veces me desvanecí y lloré desconsoladamente por cosas del mundo olvidando que Dios siempre provee lo necesario.

Debo decir que contrario a lo que parece, tuve un día hermoso. Dejé de lado todas las ocupaciones pendientes aprovechando que se trataba de un día libre y entré en mi lugar secreto, esa intimidad de mi cuarto donde sólo estamos Tú y yo hablando cara a cara. Coloqué música de fondo y me dispuse a leer tu palabra nuevamente. Me dijiste tantas cosas que aún intento digerirlas todas. Me recordaste primero que dejaste tu paz en mí y por eso mi corazón está tan tranquilo (Juan 14:27) y luego quisiste decirme que las palabras de Tu Hijo Jesucristo son las que me condenarán el día último, porque Él no habla por su cuenta sino que transmite Tú mensaje (Juan 12:48) y me siento feliz de saber que mi condición de homosexualidad y la tuya jamás fué juzgada por Él. 

Mami (sé que me pediste no llamarte así, pero en éste blog no puedo poner tu nombre), te despediste hoy tal como debía pasar pero has dejado un árbol plantado, aumentarme ese deseo de estar cada vez más cerca de mi Padre. En realidad no te has ido, estás dejando que Dios te hable para encontrar su voluntad y mientrás tanto yo cada día estoy más segura de conocerla porque Él me lo dice dejando que mi corazón haga crecer mi amor por tí y por Él al mismo tiempo y bien sabemos que el bien y el mal no pueden estar juntos en un mismo corazón. No será entonces que ambos amores son parte del bien?

Qué feliz se vive siendo aceptada tal como soy por el Creador de todos y todas las cosas! Tenemos un propósito juntas, no tardes tanto en descubrirlo, mejor dicho, no tardes tanto en leer las señales de Dios y aceptarlas. Aunque sabes qué? Tarda lo que debas tardar, el tiempo sólo fortalecerá éste amor en mí y en tí y así sea largo el camino, la meta será la misma. 

lunes, 24 de marzo de 2014

El amor viene de Dios, es amor lo que sientes?

Han sido unos días intensos en todo sentido, muchas ocupaciones y cosas pendientes que se acompañan de esa sensación de no tener el tiempo suficiente para todo, algunos problemas familiares que nunca faltan pero que siempre afortunadamente logramos superar con la bendición de Dios y una revolución interior que apenas comienza. 

Desde aquella noche continuamos hablándonos, te has encargado de limitar nuestros temas de conversación a Dios y lo estrictamente necesario por lo que sigo sin saber cosas banales de tí en relación a qué haces, cómo está tu familia, tu mascota, tus estudios, etc. Sin embargo, comprendo que es lo mejor y te felicito por colocar esos límites necesarios para que ésto no sea una tentación mayor.

No sé si estés leyendo las cosas que escribo, preferiría que no fuera asi pero me tomo el tiempo de venir aquí y redactar éstas líneas para dejar documentado todo éste proceso de encuentro que hoy estamos viviendo porque algún día vamos a querer recordarlo todo y leer éste blog nos llenará de paz. 

Hemos compartido muchas horas del día a través de los mensajes enviados, es impresionante como Dios puede manifestarse por medio de un celular. Tu llegada me ha impulsado a ampliar mis horas de lectura de la palabra de Dios, si antes dedicaba 1 o 2 horas, ahora dedico 5 o 6 al día, muchas tomando en cuenta las cosas que tengo por hacer pero antes que nada está Dios y mi sed por encontrar las respuestas y ayudarte a tí a encontrarlas.

Muchos versículos que te he enviado han llegado a mí incidentalmente, otros los conocía y recordaba, pero la gran mayoría de ellos los ha puesto Dios en mi lectura como si supiera que debía enviartelos a tí. No me cabe duda que los que me has enviado tú han sido escogidos por Dios porque todos y cada uno de ellos me dicen algo en el momento justo. 

Hay muchísimas cosas que reflexionar en todo ésto, lo primero que me pregunto es si alguien que viva en el pecado puede transmitir el mensaje de Dios de un modo tan especial y bonito. Se que tú me amas, se que sientes aún eso en tu pecho aunque no me lo has dicho, entonces, si tus sentimientos formaran parte de la oscuridad no podrías ser luz para nadie y eso es precisamente lo que eres para mí.Y es que bien dice la palabra de Nuestro Padre en 1 Juan 4:7 "Queridos hermanos debemos amarnos unos a otros porque EL AMOR VIENE DE DIOS. Todo el que ama es Hijo de Dios y conoce a Dios". Asi que quizás la clave no es comprender si basandonos en la ley ésto está bien o no, sino más bien entender si lo que sientes es amor o no, porque al ser amor ya viene de Dios y sólo El conoce de verdad la ley porque Dios es la ley.  No existe mandamiento más importante que el amor y sólo el amor prevalecerá en el tiempo. 

Yo comprendí hace tiempo que siento amor por tí y en contra del amor no hay nada, absolutamente nada escrito en la Biblia, al contrario, siempre a favor. 

Agradezco a Dios hablarte porque me hace mejor persona cada día, porque aprendo y predico al mismo tiempo, porque finalmente puedo compartir contigo éste enamoramiento por Dios y esas charlas bíblicas que siempre quise tener. 

 Disfrutaré ésta etapa hasta que debamos cumplir con la voluntad de Dios sea cual sea.



viernes, 21 de marzo de 2014

LO POCO QUE NECESITO



He vuelto a escribir desde el 25 de enero y es probable que a partir de ahora lo haga mas a menudo en éste blog. No lo hago porque deseo que tú lo leas sino porque después de hablar contigo esa noche en mi mente permanecen varias de las interrogantes que tú me hiciste y que de momento no pude responder, no por falta de respuesta sino por no poder organizar mis ideas para expresar claramente lo que sentía. Intentaré contestar todas tus preguntas con el paso del tiempo porque aunque nuestra relación no vuelva quiero dejar plasmado en letras lo que pasó contado desde mi corazón y alma. 

Esa madrugada preguntaste cómo podía yo saber que ésta vez sería diferente y no volvería a querer huir destruyéndolo todo. Eso no es fácil de contestar porque el futuro es incierto en todo momento pero comprender lo que necesito para vivir puede responder ésto. 

Yo era una persona que despertaba cada mañana feliz, agradeciendo a Dios estar sana y darme la oportunidad de hacer las cosas bien, de ser diferente en el sentido correcto teniendo una relación, aunque homosexual, seria y especial. Me enorgullecía decir que sólo había estado con una persona en mi vida, tú, y me sentía aun mejor de pensar que por siempre serías sólo tú. Mis días corrían desde mi infancia aferrándome a ese gran sueño de ser madre y poder traer al mundo a mis hijos del modo más natural posible, inclusive sin analgésicos. Me sentía segura a tu lado, guardando mi virginidad para ese momento especial que pudiera algún día compartir contigo y nadie más. 

Ese diciembre todo cambió, la noticia de estar enfermas me hizo renunciar a muchas de las cosas que soñé con tanta intensidad. No podría dar a luz, no podría disfrutar de ese momento especial para el que me guardaba y existía la posibilidad de que mi relación no fuese tan correcta como lo creía. 

La consecuencia de eso? Me perdí a mí misma.

Dejé de saber quién era, en parte por no reconocer mi cuerpo como mío y en otra porque emocionalmente estaba confundida buscando un responsable. Comencé a despertar cada día triste creyendo que esos pocos sueños perdidos eran la razón de mi felicidad. Me veía en sueños en un quirófano recibiendo una césarea y perdiendome de la que sería la mejor experiencia de mi vida y la más esperada. Me veía en sueños dejando de ser virgen a la fuerza después de haber esperado 23 años para ello. Me veía siendo engañada por tí. Me veía enferma y esa no era yo, era alguien totalmente desconocido para mí. Sentía que mi vida no encajaba conmigo.

Mi partida fué un acto de desesperación por encontrarme. Tenía que averiguar cómo ser yo. Fuí egoísta y pensé todo éste tiempo sólo en mí. Quise derrumbarlo todo y empezar de cero, destruirlo todo y encontrar una vida que encajara con quién soy ahora.

Pero, cuánto realmente necesitamos para ser felices? Tuve que renunciar a muchas cosas pero hoy sé quién soy de nuevo y lo que he aprendido es que necesito poco para ser feliz. Puedo vivir con una césarea porque de igual forma mis hijos nacerán, estarán aquí para darnos calor algún día y sabrán que fuí responsable y los traje al mundo de ese modo para protegerlos y nada más. Puedo vivir con un himén desgarrado porque antes de eso tuve momentos maravillosos a tu lado y porque ese día tu estabas ahí llorando conmigo, acompañandome en mi dolor de un modo diferente, pero lo diferente no siempre está mal. Puedo vivir enferma porque afortunadamente eso no me quitará la vida y mi labor diaria en el hospital me ha enseñado que hay enfermedades peores. He tenido que renunciar a muchas cosas, pero ellas no definen quién soy ni mi felicidad.

Sé quien soy hoy y lo que sí necesito para ser feliz es muy poco: a Dios, a tí y a nuestros hijos. Sólo eso basta para considerarme afortunada por el resto de mi vida y me temo que ahora que lo comprendo he perdido tu confianza. No creo que entendiendo ésto vuelva a perderme a mí misma.

Necesitaba todo lo que hice para comprender algo tan básico? Probablemente no, pude haberlo comprendido en soledad tomándome el tiempo necesario para pensar pero escogí el camino incorrecto, sin embargo, agradezco cada experiencia que éste año viví porque me hizo entender lo que para mí pasará a ser aquello que defina mi vida.

De lo poco que tengo para vivir, mucho menos necesito para ser feliz.